viernes, 25 de marzo de 2016

ARNOLD J. TOYNBEE Y SU ESTUDIO DE LA HISTORIA

ARNOLD J. TOYNBEE Y SU ESTUDIO DE LA HISTORIA…CÍCLICA
 

Tomado de: http://adnhistoriadelarte.com
Autor: JOB FLORES FERNÁNDEZ
Fecha: 2014


ARNOLD J. TOYNBEE Y SU ESTUDIO DE LA HISTORIA…CÍCLICA

Arnold Joseph Toynbee, (14 de abril de 1889, Londres – 22 de octubre de 1975) fue un especialista en filosofía de la historia, que creó una concepción cíclica de la historia. A diferencia de Spengler, del que hablamos en otro artículo, él pensaba que una cultura que supiera resolver sus problemas sería capaz de escapar al fin natural del ciclo, que es la desaparición. Su obra clave, Estudio de la Historia, una obra de 12 volúmenes escritos entre 1939 y 1961.

A continuación citamos un resumen de su teoría según aparece en elgrancielo.blogspot.com.es, a la vez que comentamos las similitudes y diferencias con nuestro método.

UNA HISTORIA CÍCLICA Y LINEAL
 

En ese sentido, los ciclos históricos de Toynbee no llevan a una concepción cíclica de la historia, sino a que la historia marcha “hacia adelante”, pero con retrocesos que son purificaciones de aspectos malos o negativos que impiden seguir progresando.

Para explicar esto emplea la metáfora de las “ruedas de carreta”, que giran monótonamente sobre su propio eje y no van a ninguna parte por sí mismas, pero que sirven a un fin más trascendente que la rueda en sí misma, cual es el impulsar el vehículo completo que apoyan, hacia adelante.

El método que empleamos sigue estos principios, pues como dijimos desde el principio, cada año es diferente del anterior aunque las cuatro estaciones se siguen repitiendo.

Una concepción de historia cíclica complementa a una lineal, no son modelos opuestos.

Y evidentemente, los avances técnicos y de cualquier otro tipo se heredan y se mejoran.

UN CICLO DE TRES TIEMPOS Y MEDIO

A continuación resumimos la teoría de Arnold Toynbee a través de un ejemplo puesto por él mismo, la civilización helénica:

Primer tiempo:

a) Caída: comienza con un colapso general y una entrada en un llamado “tiempo de angustia” en el que se forman estados fragmentarios o parroquiales.

b) Recuperación: Le sigue una recuperación consistente en la pacificación de las guerras que han llevado a la formación de esos estados.

Arnold Toynbee habla de las guerras intestinas iniciales entre los estados griegos, como Atenas y Esparta, y al statu quo o estabilidad que se consiguió más adelante.

Segundo tiempo:

a) Caída: los estados parroquiales o fragmentarios luchan entre sí por la supremacía.

b) Recuperación: los estados fragmentarios son absorbidos y se forma un estado universal.

A. Toynbee se refiere a las nuevas luchas surgidas con las guerras púnicas y al siguiente estado de unificación que trajo el Imperio Romano en su fase inicial, desde Julio César al último Antonino.

Tercer tiempo:

a) Caída: crisis del estado universal.

b) Recuperación: restablecimiento del orden en el estado universal.

El escritor hace referencia a la crisis tras la muerte de Alejandro Severo y a la recuperación aparente bajo los gobiernos despóticos de Diocleciano y Constantino, a la vez que se expande el cristianismo.

Tercer tiempo y medio:

a) Caída final: destrucción del estado universal, creación de estados sucesores bárbaros, y desintegración de la sociedad.

Invasión de pueblos germanos y formación de Reinos Germano-romanos antes del interregno final.

En la gráfica que adjuntamos, se ve claramente como las fases de nuestro método coinciden perfectamente con lo propuesto por Arnold Toynbee. De nuevo estudios separados que convergen en un punto: el del círculo del tiempo de una historia cíclica.
 
El avance que supone nuestro método es que hemos hallado un patrón de tiempo fijo en el que estos ciclos se repiten.

Como se verá, con todos los respetos nos hemos permitido añadir un “medio tiempo” que a nuestro parecer faltaba, y que consiste en la recuperación que supuso el Imperio Carolingio antes de la descomposición final de la que surgirían los estados modernos.

Para finalizar, decir que este mismo esquema del mundo griego y romano es aplicable a nuestra civilización, como se explicó en el artículo “Spengler y la Decadencia de Occidente”, y que no estamos aventurando en la Tercera Fase de Arnold Toynbee, como vimos en el artículo “La época más feliz de la humanidad”.

Sobre si una cultura está destinada a desaparecer o puede escapar del ciclo inevitable ¿Tendrá razón el Spengler o Arnold Toynbee? ¿Esta nuestra cultura destinada a desaparecer como todas las anteriores? ¿Seremos capaces a diferencia de nuestros antecesores de encontrar la clave que nos permita superar nuestras diferencias y romper este ciclo?

Cortesía de: Adnhistoriadelarte.com                                                        
 
Autor: JOB FLORES FERNÁNDEZ 2014 (C)
 
Artículo tomado de: http://adnhistoriadelarte.com/2014/12/30/arnold-j-toynbee-y-su-estudio-de-la-historia-ciclica/

ECONOMISTAS CÍCLICOS

 ECONOMISTAS CÍCLICOS


Tomado de: http://adnhistoriadelarte.com
Autor: JOB FLORES FERNÁNDEZ
Año: 2015

ECONOMISTAS CÍCLICOS

“Money makes the world go round” (el dinero hace que el mundo gire). Esta famosa letra de cabaret dice una gran verdad. La cuestión es, ¿gira el mundo económico en ciclos precisos? Esto sería muy lógico, pues economía, arte, guerra y política están muy relacionados.

En nuestra serie de artículos sobre autores cíclicos, hoy analizamos un economista que halló ciclos precisos de tiempo en los vaivenes de las riquezas.

Se trata de Joseph Alois Schumpeter (República Checa, 1883 – EEUU, 1950) este destacado economista fue ministro de finanzas en Austria y profesor de la Universidad de Harvard (EEUU). Escribió obras como Teoría del desarrollo económico (1912), Los ciclos económicos (1939), Capitalismo, socialismo y democracia (1942) y La historia del análisis económico (póstuma, 1954).

Joseph pasa a describir tres ciclos económicos. Todos llevan el nombre de otros economistas cíclicos:
– El ciclo de Kitchin, de 40 meses.
– El ciclo de Juglar, de 10 años.
– El ciclo de Kondrátiev, de 60 años.


Este ciclo “largo” es muy relevante. N. D. Kondrátiev(1892-1938) fue un destacado economista ruso que murió fusilado por sus ideas.
Kondrátiev establece este ciclo siguiendo la siguiente serie de años:

1790-1815 positivo y 1815-1849 negativo
1850-1873 positivo y 1873-1896 negativo

Sin saber que este ciclo de Kondrátiev existía como tal, llevo 10 años usando un ciclo similar de unos 60 años en mis estudios de historia cíclica.

Llegué a ese número seguro de la misma manera que llegaron Kondrátiev y Schumpeter: por pura evidencia al contrastar los resultados. Ellos llegaron a ese ciclo a través de la economía, yo a través del producto de la economía, el arte.

El proceso que Schumpeter describe es similar al que explico en mis conferencias, solo que yo lo aplicaba a la creatividad en el arte. El ciclo de unos 60 años se divide en 30 años de ascenso y 30 de descenso. El funcionamiento sería el siguiente.

Ascenso:
1. Un emprendedor tiene una idea revolucionaria que funciona. Por mera imitación, grupos de emprendedores se unen a la innovación.

2. Las ganancias se disparan, pero a la vez que se asciende la lucha y la competición cada vez es más dura, pues cada vez más emprendedores se unen al invento.

Descenso:
3. Cuando llega a la cima, lo “nuevo” se ha hecho tan normal, que el emprendedor se convierte en un empresario más, que solo administra un “territorio conquistado”.

4. El mercado tiende al equilibro, y una vez que la expansión inicial ha sido absorbida, se entra en una fase de estancamiento y depresión. El mercado se ha saturado. Lo nuevo ya es viejo.

Los discípulos de Shumpeter se encuentran hoy diseminados en universidades o son economistas en Gran Bretaña, Alemania, Bélgica, Gran Bretaña, Holanda, Suecia, Japón y Estados Unidos.

Pero una duda pende sobre este método. Joseph se preguntaba: ¿Por qué no ocurre el desarrollo económico, con la misma regularidad con que crecen los árboles, sino a saltos? ¿Por qué presenta esas alzas y bajas características?
 
Entonces afirma que la innovación y los emprendedores son la base del progreso del sistema económico, y que la acción de uno solo, abre los ojos a los demás, formando grupos que levantan la economía. Aun así, la pregunta sigue sin resolver: ¿por qué aparecen los emprendedores de manera rítmica, con alzas y bajas?

En este caso como en el de otros economistas cíclicos, falta una razón empírica que demuestre por qué se producen esos ciclos.

Como en el caso Deulofeu, el mío propio, y otros, existe una reticencia por parte del público a pensar que esa periodicidad tan exacta sea posible. Y el verdadero problema reside en explicar empíricamente POR QUÉ se producen, Pero lo que siempre está claro y es fácilmente demostrable es que el ciclo preciso existe.

¿Como si no se explica que un farmacéutico, un empleado de banco, economistas, un ministro y un profesor de arte, de distintas épocas y sin conocerse, han llegado a la misma cifra exacta?

Un sismógrafo simplemente registra la acción del sismo. Aunque no sepa por qué se produce, lo que está claro es que las vibraciones se producen y el terremoto está a las puertas.

Ignorar esto sería como negar que el día tiene 24 horas solo porque no entendamos porqué son 24 y no 23 ó 25. Aunque no supiéramos que la razón es la rotación de nuestro planeta, el día seguirá teniendo 24 horas, y negarlo o ignorarlo no tendría ningún sentido.

No saber la causa de un fenómeno no debería llevarnos a negar su existencia o ignorarla.

Aún así, existe una explicación bastante sencilla: los grandes eventos de la naturaleza se mueven en ciclos precisos en el tiempo. Los humanos somos parte de ella, y nos movemos en ciclos. Puesto que nuestra vida está limitada por una serie definida de años como media, lo lógico es que nuestras acciones también lo estén.

Como conclusión, admito que no sé si es “el dinero el que hace girar al mundo” o el mundo que hace girar al dinero. Lo que sí está claro es que el giro durará unos 60 años.

Autor: JOB FLORES FERNÁNDEZ. 2015 (C)

Cortesía de: ADNHISTORIADELARTE.COM

Artículo tomado de: http://adnhistoriadelarte.com/2015/04/01/economistas-ciclicos/